Frente a la página en blanco
me pregunto sobre temas existenciales,
personales, tribales, nacionales.

El otoño añorado ya ha llegado, 
toca, y vuelve a tocar mis ventanales,
exteriores, internos, personales.

¿Serán quizás aquellos vientos esperanzadores
que anuncian los nuevos tiempos,
o, Dios nos valga,
pregoneros de temporales?

Tal como dijo Heráclito
tres milenios ha,
todo fluye,
está en perpetua alteración
,

Y yo me pregunto:
¿Tanto cambia el todo hasta que…
solamente la esencia subsiste?

El flujo perpetuo, 
la esperanza del devenir, 
¡Esa es la constante!

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